05 octubre 2008

La operación política Astapa y los peligros de la generación del régimen chavista

Noticia publicada en lunes, agosto 18, 2008

ATC
Con el tiempo se están viendo a las claras, cuáles eran las intenciones de una jueza del régimen chavista y un discípulo rojo del mismo, ambos treintañeros, nacidos en los albores de la democracia. Tres décadas del mismo régimen en Andalucía han bastado para que éstos niños de la Transición, consideren que la democracia es suya, entendida, como en el caso de Valadez que pertenece al partido del régimen, dueño de la misma, y por tanto le pertenece. Valadez no ha escatimado medios para burlar la democracia y conseguir su objetivo para tomar sillón en el régimen también, el único que conoce, el socialista chavista. Seguramente en el de Franco habría hecho lo mismo. ¿Cómo creerá este señor que se ha perpetuado su partido durante 30 años en Andalucía?. ¿No ha leído la telaraña andaluza?. ¿No ha contratado gente a dedo su partido?. Sólo en la Junta a más de 5.000. En todos los pueblos donde gobierna, ni se sabe. ¿No han ejercido el tráfico de influencias? ¿No han hecho trato de favor a nadie?. Por favor lean “La telaraña andaluza”.

El régimen que tenemos en Andalucía, implantado desde los inicios de la democracia, está haciendo mucho daño a la misma. Hasta tal punto es así que en prácticamente todos los pueblos de Andalucía se está convirtiendo en poco menos que delictivo el ejercicio de la legítima crítica por parte de quien pretenda discrepar del mismo. Esto es especialmente patente en casos de municipios pequeños; donde el PSOE ha creado unas redes de favoritismos y subvenciones; que, en vista del subdesarrollo en el que viven, desde el punto de vista económico (después de 30 años y dos “modernizaciones”), acaban mostrándose “agradecidos” al régimen, estableciéndose con éste incluso lazos sentimentales. En estos pueblos la gente, incluso de signo contrario al régimen tiene miedo de opinar, para no ser objeto de represalias traducidas en la negación de ayudas que sí recibirá su vecino. Sí, existe miedo en Andalucía a la opinión libre. Y quien la ejerza, debe saber que será marginado en su pueblo. Por no hablar del fraude del seguro agrario y el conocido PER. Me temo que algún día tendremos que hablar de ello. Amén del miedo a opinar entre la juventud del régimen, nacidos y criados en la transición, objeto también de ayuditas para su grupo musical o la cultura en general. Atrás quedó la rebeldía tradicional de la juventud; canalizada hoy hacia el botellón y la juerga. La no política para no ser objeto de las represalias o la indiferencia del régimen. Es lo que se conoce ahora la juventud “progre”.

En estos pueblos, donde el desarrollo brilla por su ausencia, no es extraño ver como los únicos que progresan son los alcaldes del régimen que al salir de la alcaldía son propietarios de varios y de los mejores situados negocios del pueblo. Algunos de éstos, ni siquiera habían obtenido el grtaduado escolar, antes de hacerse hombres del régimen, para acabar con una fortuna tras su paso por la alcaldía durante 12 ó 8 años.

La operación política Astapa, comenzó en 2006, por obra gracia y justicia de un fiscal digital, un año antes de las municipales y se ha prolongado hasta la actualidad y es una muestra de como el régimen que se ha enquistado ya por 30 años en Andalucía, manda y ordena sobre los jueces nacidos al amparo del mismo. Hasta tal punto es así que hoy tenemos presos políticos esteponeros con menos mancha corrupta que quien tras un golpe de estado municipal, ostenta hoy la alcaldía; cómplice de una operación política urdida para no perder el gobierno municipal, la sombra del régimen.


Sí, presos políticos por una jueza que, mientras dirime en qué se basan los delitos que les imputa, lo cual es irregular e inconstitucional (pues antes de privar a alguien de su libertad, que es lo más sagrado de nuestra Constitución, deben estar sustanciados los delitos y el cómo se cometieron antes de tomar dicha medida) los mete en la cárcel, mientras busca pruebas para mantener su imputación. Hoy publica la prensa la obsolución de un responsable de cierto juzgado por la sustración de más de 800.000 euros de dicho juzgado. El motivo falta de pruebas. Pero ¿no había pruebas para su imputación cuando se inician diligencias previas que acaban imputándole?. Si no había pruebas porqué se le imputó la sustracción de dicha cantidad. Este hombre ha sido absuelto, tampoco pisó la cárcel.


No obstante, si se demuestra la inocencia de los encarcelados en Astapa: ¿qué jueza les eximirá de los dos meses ya que llevan en cárcel, y por lo visto lo que te rondaré, morena?. ¿Qué sanción habría que imponerle a ella para restaurar el honor perdido por su causa, de aquellos que metió en la cárcel injustamente y sólo por razones políticas como ya hemos explicado en bastantes entradas anteriores?

¿Qué legitimación democrática tiene hoy Valadez? -Ninguna-. Él se presentó con unas siglas, un programa y un primero en la lista; aceptado por él, que no quiso dimitir a sabiendas de saber lo que sabía, que, por cierto, aún no se sabe muy bien qué es. Y que cuando se sepa habrá que ponerlo en duda y mirar con lupa el sumario, pues, como digo esta operación premeditada y ocultada para no perjudicar al PSOE en tres épocas electorales, tiene muchas sombras desde sus inicios en 2006 como continuidad de la operación Malaya. Y a lo mejor al levantarse el secreto del sumario, descubramos algunos “secretos” que ahora no se conocen. En cualquier caso él ha usurpado la alcaldía, siendo parte de un proceso que él sabía se iba a abrir y que lo ocultó, no para defender a Estepona, sino para defender a su partido. Estos son los peligros de la generación del régimen, a los que, por lo visto todo les vale, entre otros. ¿Dónde está y dónde estaba el programa electoral de Valadez?: callar y preparar el merecido a Barrientos. Cabe preguntarse ahora: si hubiera hablado sobre su “programa” electoral ¿hubiese votado la gente a su partido y, por tanto a él?. El régimen es el régimen, la democracia es sólo el instrumento para mantenerse en él como sea.

La convocatoria de elecciones, recogida en la Constitución, hubiera permitido, a lo mejor, a alguien honrado poderse haber presentado; ya que al parecer era eso lo que necesitaba Estepona, en igualdad de condiciones a cualquier otra persona, incluso dentro de su partido, a presentarse en las listas. ¿O el monopolio de la “honradez” acaso es patrimonio monopolístico del PSOE?. Máxime cuando, además, todo ha sido premeditado y ha sido un claro golpe contra la democracia. ¿Sería esta la razón para decidir no dimitir tras una reunión en Sevilla, a pesar de haber afirmado previamente que si las cosas no se arreglaban, entre sus opciones estaba ésta. Después de exigir a la dirección del PSOE regional, eliminar a Barrientos. Con quien él no quería presentarse en la lista de las municipales de 27 de Mayo de 2007?

Si nos detenemos en la cronología de los hechos descubrimos que Valadez, presa del pánico, o sea como diríamos en Estepona: “giñaíto”, tras la aparición de noticias que apuntaban a los consejeros delegados de las empresas municipales de hacer frente con sus bienes personales a las pérdidas de las mismas; que estaban siendo investigadas por el Tribunal de Cuentas (el mismo que investiga 1000 millones de euros de pérdidas de las empresas públicas de la Junta), decide abandonar su cargo en las mismas, pese a haberse mantenido “como si nada” durante más de dos años en el puesto, que, más tarde ¿a petición de su partido? decidiría retomar…

El peligro está en que éste es un ejemplo de que, por lo visto, a nadie sorprende más que eliminen la democracia en un pueblo o ciudad de España, basándode en una supuesta operación policial, donde en este caso, como se verá, el propio denunciante fue partícipe de los hechos que denuncia y ahora ostenta la alcaldía a través de un golpe de estado judicial. Que, además estuvo urdido por fiscales, jueces y representantes de un partido político para no perjudicarle electoralmente. ¿Alguien da más? ¿Quién dijo corrupción?.

Por cierto, en la foto, el alcalde golpista enharbolando el bastón de mando que entregó a Estepona el ex-alcalde Gil Marín. Digo yo, ¿estarán investigando también la procedencia del mismo?


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